HECHIZOS DE LAS MANZANAS MÁGICAS DE AMOR Y ODIO

30 abril, 2018 Desactivado Por admin

Como los dos lados de Afrodita revelan una diosa enamorada tanto como vengativa, la magia tradicional y occidental que utiliza la manzana puede ser tan beneficiosa como perjudicial, manteniendo sin embargo siempre un vínculo con el dominio de Afrodita.

La magia de las manzanas es muy antigua ya que ya se hacía en Babilonia cuando eran frutos dedicados a Ishtar. El uso de un fruto u otros elementos fácilmente encontrados en su entorno es la marca de una magia muy primitiva ya que es simple; la disciplina, de hecho, se ha vuelto más compleja con el tiempo. O por el contrario, puede ser la marca de una magia muy contemporánea que utiliza elementos de fácil acceso que se han vuelto indispensables en un mundo cada vez más urbanizado y complejo en el que encontrar tiempo para un ritual puede convertirse en un reto, una necesidad añadida en una agenda sobrecargada.

Afortunadamente, los antiguos rituales con manzanas saben ser sencillos, especialmente los que se refieren a la adivinación en el amor:

Saber si eres amado por alguien
“Toma una manzana, córtala por la mitad con un cuchillo afilado; si puedes hacerlo sin cortar una semilla, el deseo de tu corazón se cumplirá, pero si accidentalmente cortas una semilla, no habrás ganado el amor de la persona.

Para soñar con el hombre con el que debes casarte
“Siéntate en la ventana la víspera del día de San Andrés y coge una manzana de la ventana sin dar las gracias a la persona que te la va a dar. Corta la fruta por la mitad; come la mitad antes de medianoche y la otra mitad después de medianoche; luego duerme; verás en sueños a tu futuro esposo”.

Alexandre Legran: Los verdaderos secretos de la magia negra.

Los rituales destinados a provocar el amor, más difíciles y más largos de llevar a cabo, han ganado en complejidad desde la época babilónica, requiriendo etapas precisas como el día de Venus, y otros elementos personales e íntimos como la sangre, el cabello, una intención clara y escrita, los nombres de los protagonistas, atestiguan esta receta del Pequeño Alberto :

La manzana del amor
“Un viernes por la mañana, antes del amanecer, irás a un huerto de frutas y recogerás la manzana más hermosa que puedas de un árbol. Luego escribirás con tu sangre en una pequeña hoja de papel blanco tu nombre y apodo y, en otra línea siguiente, el nombre y apodo de la persona a la que quieres amar y tratarás de tener tres de sus cabellos, que unirás con tres de los tuyos propios, lo que te servirá para atar la pequeña nota que habrás escrito con otro, en la que sólo habrá la palabra Scheva, También escrito en tu sangre, luego partirás la manzana en dos, quitarás las semillas y, en su lugar, pondrás tus picos atados por el pelo y, con dos pinchitos puntiagudos de ramas de mirto verde, unirás bien las dos mitades de manzana y la harás secar bien en el horno, para que se endurezca y no tenga humedad, como las manzanas secas de Cuaresma. Luego la envolverás en hojas de laurel y tratarás de ponerla bajo la cabecera de la cama donde duerme la persona amada, sin que ella se dé cuenta y, poco después, ella te dará señales de su amor.